los artistas están dando visibilidad a los problemas de salud mental que padecen. Una manera de desterrar tabúes y de poner en primera línea esas dolencias del alma que pueden provocarnos miedos e inseguridades.
Selena Gomez, sin ir más lejos, tuvo muchas dudas de si lanzar ese 'My mind and me'. Una cinta documental con mucha repercusión y, dicho sea de paso, muy necesaria por la repercusión que tiene cada una de las cosas que hace o dice una de las estrellas más grandes que ha dado el universo Disney. Porque los periodos de ansiedad y depresión que ha atravesando en diferentes etapas, han sido comentados, pero no estaban ordenados y explicados en profundidad como ahí. También ese trastorno de bipolaridad del que fue diagnosticada.
Sin embargo, ahora, lo que hace es pronunciarse sobre todas las vueltas que le dio al poner en marcha este proyecto o cómo le afecta, en estos momentos, darle al 'play' a ese trabajo. Lo hace casi un año después del lanzamiento, y de una manera muy contundente: "Estaba muy en contra. Durante un largo período de tiempo no sabía si se trataba de una buena idea. En alguna ocasión, pensé que a lo mejor durante un tiempo solo me quería dedicar a ser actriz y no sabía si eso podría poner en peligro cosas de mi vida. No sabía que estaba haciendo dejando entrar a gente en mi vida".
En esa exposición, Selena reconocía que se dio cuenta del punto de no retorno ante el que se encontraba en el mismo momento en el que se lanzó la grabación. "No tenía opción en ese punto. Y estaba aliviada. Sentí como me quité un gran peso de encima. Sentía que tenía muchas cosas que decir que me estuve guardando durante años", explica antes de asegurar que, ahora, a pesar de sentirse "muy orgullosa del documental", a día de hoy le resulta "muy complicado verlo".